COLUMNA DE INVITADOS:
por Tabinda Sarosh, Presidente, Asia Meridional, Oriente Medio y Norte de África, Pathfinder International
En Pathfinder, vemos cada día cómo algunos de los mayores retos globales del mundo -desastres naturales inducidos por el cambio climático, conflictos prolongados y desigualdades crecientes- siguen haciendo la vida cada vez más difícil a las comunidades a las que servimos. Hoy escribo esto mientras el ciclón Sitrang avanza rápidamente hacia la costa de Bangladesh, y espero y rezo por la seguridad de nuestro equipo allí.
En Bangladesh, las catástrofes naturales se han convertido en una realidad frecuente. A principios de este año, muchas de las comunidades donde trabajamos en Sylhet y Sunamganj sufrieron inundaciones, las peores en 122 años, que dejaron a más de 4 millones de personas en riesgo de hambruna y sin agua potable ni atención sanitaria básica. El día antes de la última inundación en Sylhet, supimos de dos mujeres, Jorina Begum y Minara Begum, que habían acudido a un centro de salud apoyado por Pathfinder para obtener su primer DIU. Habían observado cómo subía el nivel del agua y no querían volver a vivir lo mismo que en el pasado: embarazos no deseados que tuvieron lugar cuando los servicios dejaron de estar disponibles durante las inundaciones. En Pathfinder sabemos que el futuro de las mujeres, las niñas y sus comunidades empieza por la salud reproductiva. Por eso actuamos con decisión para ajustarnos, adaptarnos y satisfacer constantemente las necesidades de las personas a las que servimos.
El ciclón que azota Bangladesh sigue a las inundaciones masivas en mi propio país, Pakistán, que en septiembre dejaron a 6,4 millones de personas necesitadas de ayuda humanitaria. En Sindh, donde Pathfinder ha trabajado en los últimos años para promover la salud y los derechos sexuales y reproductivos, más de 1.000 centros de salud sufrieron daños y no pudieron prestar servicios esenciales a las mujeres embarazadas. Aunque tuvimos que seguir haciendo nuestro trabajo habitual de mantener en marcha nuestros programas, también tuvimos que pivotar para apoyar a ACNUR y UNFPA en la distribución de medicamentos de emergencia y equipos sanitarios.
Sabemos que una de nuestras mayores prioridades debe ser conseguir que los sistemas sanitarios sean resistentes a emergencias como estas. Por eso estamos trabajando en Bangladesh y Pakistán para hacer precisamente eso: reforzar los sistemas de las comunidades y los centros de salud para que puedan seguir atendiendo a la gente cuando se produce una emergencia.
Al mismo tiempo, necesitamos soluciones de resiliencia climática basadas en la comunidad. Pathfinder también trabaja con las comunidades de Bangladesh y Pakistán, y en particular con las mujeres que están en primera línea del cambio climático, para encontrar soluciones locales que aumenten la resiliencia climática de sus comunidades. Esto significa empezar por la salud sexual y reproductiva, pero también ir más allá para apoyar a las mujeres con oportunidades económicas y de liderazgo, y a las comunidades con mejores prácticas de agua, saneamiento e higiene, técnicas agrícolas sostenibles y servicios de prevención y tratamiento de la violencia de género, entre otras cosas. Nuestro trabajo va mucho más allá de Bangladesh y Pakistán.
Estamos aprovechando el programa de planificación familiar existente en Egipto para transformar los centros de salud en "clínicas verdes". Estamos trabajando con migrantes climáticos en Níger para garantizar que las mujeres que emigran reciben los servicios esenciales que necesitan y que las que se quedan atrás también pueden prosperar cuando sus maridos viajan en busca de trabajo. Durante los dos últimos años, nuestra USAID Transform: Primary Health Care Activity atendió a comunidades de Etiopía durante la pandemia de COVID-19 y una guerra civil que dejó más de 2 millones de desplazados internos, llegando a más de 57 millones de personas.
Trabajamos con nuestros socios para responder a las crisis a medida que surgían, ayudar a mantener los servicios y suministros sanitarios y contribuir a las actividades de vigilancia de la salud pública en preparación para futuras emergencias, sin dejar de mejorar la gestión y el rendimiento del sistema sanitario. Nuestros equipos locales de todo el mundo -todos ellos- nos dicen que la integración de la resiliencia climática y la preparación para emergencias en nuestros programas es absolutamente fundamental para que la misión tenga impacto. Tenemos que escucharles y desarrollar soluciones a medida que garanticen el acceso continuado a la atención sanitaria sexual y reproductiva durante las crisis como base de la resiliencia. Hago un llamamiento a todos los socios de la salud mundial, a los gobiernos y a las organizaciones locales de la sociedad civil que se enfrentan a retos similares para que sigan compartiendo sus soluciones basadas en la comunidad para promover la salud y los derechos sexuales y reproductivos a través de los mayores desafíos del mundo. Demasiadas vidas dependen de ello. Espero aprender de ustedes en la próxima Conferencia Internacional sobre Planificación Familiar y más allá. Leyendas de las fotos adjuntas: Inundaciones en Sylhet, Bangladesh, junio de 2022. El día antes de la segunda inundación en la región de Sylhet, Bangladesh, las vecinas Jorina Begum (izquierda) y Minara Begum (derecha) visitaron un centro de salud apoyado por Pathfinder para obtener su primer DIU. Habían estado observando cómo subía el nivel del agua todos los días y predijeron que pronto habría otra inundación.
